Esta semana, los influencers Logan Paul y Ryan García protagonizaron una guerra en redes sociales que ahora ha escalado a un enfrentamiento legal. Logan Paul, conocido por su carrera en YouTube y su participación en eventos de boxeo, ha confirmado que ha presentado una demanda contra el boxeador californiano Ryan García por difamación.
El conflicto se originó cuando García emitió graves acusaciones sobre la bebida deportiva “Prime”, de la cual Logan Paul es accionista. En múltiples transmisiones en vivo de Instagram, García afirmó que “Prime” causaba daños severos a la salud, incluyendo el deterioro del hígado, la muerte de células cerebrales y hasta cáncer. Además, García aseguró que detrás de la compañía había un culto de adoración a Satanás y exhortó a la juventud a no consumir la bebida.
Estas declaraciones provocaron una rápida reacción de Logan Paul, quien no tardó en anunciar que había iniciado acciones legales contra García en la corte de Texas. Aunque aún se desconoce la cantidad exacta de dinero que Paul busca en compensación, la demanda subraya la seriedad con la que el influencer toma estas acusaciones, que podrían afectar tanto su reputación como las ventas y la imagen de “Prime”.
La batalla entre Paul y García ha captado la atención de sus millones de seguidores en redes sociales, quienes han estado siguiendo de cerca cada intercambio y desarrollo del conflicto. La demanda por difamación es el último episodio en esta tensa relación entre dos figuras prominentes del mundo de los deportes y las redes sociales.
El caso se desarrolla en un momento en que las acusaciones sobre productos y sus efectos en la salud se toman cada vez más en serio, especialmente cuando se difunden por figuras con grandes plataformas e influencias. La resolución de este conflicto legal podría tener implicaciones significativas no solo para los involucrados, sino también para la manera en que las afirmaciones sobre productos son manejadas en el ámbito digital.
Con información de ESPN