En recientes declaraciones, el presidente Andrés Manuel López Obrador expresó que no le sorprende la posibilidad de que Ovidio Guzmán López y Joaquín Guzmán López, hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán, estén negociando su rendición con las autoridades estadounidenses. Sin embargo, López Obrador subrayó que estas acusaciones deben ser verificadas para evitar que se utilicen como herramienta de chantaje contra México.

 

El mandatario comentó que los posibles acuerdos entre Los Chapitos y Washington podrían abrir la puerta a acusaciones que involucren a otros miembros del Cartel de Sinaloa y posiblemente a funcionarios mexicanos. A pesar de que López Obrador está a favor de combatir las complicidades entre el crimen organizado y las autoridades, advirtió que cualquier señalamiento debe ser probado para prevenir intromisiones externas que vulneren la soberanía nacional.

 

Detalles de las negociaciones y la respuesta del gobierno mexicano

 

López Obrador hizo estas declaraciones tras reportes de que Ovidio Guzmán López, extraditado en septiembre, y Joaquín Guzmán López estarían considerando colaborar con las autoridades estadounidenses a cambio de beneficios judiciales. El periódico Milenio reveló que estas negociaciones también podrían involucrar a Néstor Isidro Pérez Salas, conocido como “El Nini“, jefe de seguridad de Los Chapitos.

 

Aunque el abogado de la familia Guzmán, Jeffrey Lichtman, negó que exista un acuerdo, las autoridades estadounidenses han confirmado que Joaquín Guzmán López fue entregado el 25 de julio tras su captura en Nuevo México. Además, la detención de Ismael “El Mayo” Zambada, quien alegó haber sido secuestrado y traicionado, ha alimentado sospechas de colusión entre autoridades mexicanas y el crimen organizado.

 

Tensiones y consecuencias para la relación México-Estados Unidos

 

El arresto de Zambada y Guzmán López ha generado tensiones diplomáticas, dado que el Gobierno mexicano no fue consultado ni informado de antemano. López Obrador ha señalado que estos eventos podrían ser parte de una estrategia estadounidense para debilitar su administración. Además, el mandatario pidió paz en Sinaloa tras los recientes asesinatos relacionados con el Cartel de Sinaloa y criticó a la organización Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI) por su presunta campaña en contra de su gobierno.

 

Con estos acontecimientos, la relación entre México y Estados Unidos enfrenta un desafío adicional, mientras ambos países buscan manejar las implicaciones del caso y mantener la cooperación en seguridad.