La Cámara de Diputados aprobó por unanimidad una nueva versión de la Ley Silla, que reconoce el derecho de las personas trabajadoras a descansar en un asiento durante la jornada laboral. Esta iniciativa fue respaldada por todos los grupos parlamentarios y modifica el proyecto original avalado por el Senado en febrero de este año.

Aunque se trata de un proyecto nuevo, la reforma retoma parte del dictamen aprobado por el Senado, que se centró en la propuesta presentada por la diputada federal Patricia Mercado (MC). Sin embargo, en San Lázaro no se siguieron los trámites necesarios para continuar su discusión.

Impulso y objetivos de la nueva versión de la Ley Silla

El diputado Ricardo Monreal impulsó nuevamente la reforma, que fue suscrita por los coordinadores parlamentarios del PAN, PVEM, PT, PRI y MC. Monreal destacó que la iniciativa busca establecer la obligación de los empleadores de proporcionar suficientes asientos o sillas con respaldo para las personas trabajadoras en sectores como servicios y comercio.

La reforma mantiene el reconocimiento del descanso en una silla durante la jornada laboral y prohíbe a las empresas obligar a los trabajadores a permanecer de pie todo el tiempo. Un cambio importante es que los centros de trabajo deberán contar con un área específica para el descanso de los empleados.

Además, se proyecta incluir en el reglamento interior del centro de trabajo normativas que regulen los periodos de reposo durante la jornada laboral. La iniciativa también contempla adecuaciones de lenguaje con perspectiva de género.

Los plazos de transición permanecen sin cambios; las empresas tendrán 180 días para cumplir con las nuevas disposiciones después de que la reforma se publique en el Diario Oficial de la Federación (DOF). Monreal enfatizó que es urgente definir reformas legislativas para abordar problemáticas como explotación y acoso laboral.