Internacional
En Ucrania, bombardeo deja 11 muertos y 21 heridos
#Internacional En esta ocasión, un bombardeo perpetrado por las fuerzas rusas en la ciudad de Sloviansk, al este de Ucrania, dejó un total de 11 personas muertas, entre ellas un niño de tan solo dos años, y 21 heridos. El ataque también provocó daños en cinco edificios, una escuela y un edificio administrativo.
Las autoridades ucranianas han condenado el ataque y han iniciado una investigación para determinar los responsables del mismo. Sin embargo, las acusaciones apuntan directamente hacia Rusia como el país responsable del bombardeo. El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, se ha pronunciado en contra de la violencia y ha expresado su apoyo a las víctimas del ataque.
El grupo paramilitar Wagner, respaldado por la artillería del ejército y paracaidistas, se encuentra en la primera línea de la batalla. La situación en la zona es extremadamente tensa y se espera que la violencia continúe mientras las tropas rusas avanzan en la periferia norte y sur de Bajmut, epicentro de la batalla más larga desde el inicio de la invasión.
Bombardeo por parte de Rusia
El presidente ruso, Vladimir Putin, firmó una nueva ley que facilita la movilización de los jóvenes rusos en el ejército, lo que ha sido criticado por varios países de la comunidad internacional. La nueva ley permite la movilización de reservistas por vía electrónica y permitirá a la policía perseguir a aquellos que se nieguen a recibir la citación. Además, los rusos que no se presenten a la oficina de reclutamiento se verán privados de trabajar como empresarios o independientes, recibir préstamos o disponer de vivienda o coche.
La situación en Ucrania sigue siendo preocupante y se espera que la violencia continúe mientras las tropas rusas avanzan en la zona afectada por la invasión. La comunidad internacional ha condenado el bombardeo en Sloviansk y ha pedido a Rusia que cese su agresión y comience a buscar una solución pacífica al conflicto. Mientras tanto, las víctimas del ataque y sus familias se enfrentan a un dolor y una incertidumbre que parecen no tener fin.