Ticketmaster aseguró que la demanda para adquirir una entrada al concierto puertorriqueño Bad Bunny en México, fue la más alta en la historia, al reportarse unos 4.5 millones de personas en búsqueda de una de las 120 mil localidades disponibles.
La empresa reconoció que se registró una cifra sin precedentes de boletos falsificados para las presentaciones del cantante en el Estadio Azteca los pasado 9 y 10 de diciembre, los cuales fueron comprados fuera de los canales oficiales de dicha empresa.
Esto ocasionó caos y entorpeció la lectura de los que sí eran legítimos, al provocar intermitencia en el sistema, refirió la empresa en un comunicado publicado en sus redes sociales.
Ticketmaster insistió en que no hubo sobrecupo ni sobreventa de boletos y resaltó que para el sábado 10 se tomaron todas las medidas tecnológicas para evitar que volviera a suceder el incidente del día previo.
La firma repudió la reventa y advirtió que no tolerará ni participarán en ello y reiteró que ellos han denunciado ante las autoridades dichos casos.
“Ticketmaster no toleran ni participan en la reventa de boletos, a la que históricamente ha denunciado ante las autoridades e incentivado acciones en su contra”, añadió.
Por ello, invitó a los fans a evitar comprar en reventa, ante los evidentes riesgos de ser objetos de fraudes y adelantó que tomará medidas con ayuda de tecnología de última generación para evitar este tipo de problemas.
Reiteró las disculpas a los fans de Bad Bunny que adquirieron sus boletos de forma legítima y que no pudieron acceder al concierto.
Aseguró que colabora con la Profeco a fin de clarificar lo sucedido en los accesos al Estadio Azteca el pasado 9 de diciembre.