Iniciativa de reforma busca asegurar abasto de agua en la CDMX

En un anuncio que marca un suceso en la historia de la Ciudad de México (CDMX), el jefe de Gobierno, Martí Batres, reveló su plan para enviar una iniciativa de reforma al Congreso local con el propósito de garantizar el suministro de agua en la capital durante las próximas dos décadas y media.

La propuesta, que busca modificar los artículos 9 y 16 de la Constitución de la Ciudad de México, tiene como pilar central el cuidado, uso y aprovechamiento del agua de lluvia, una estrategia que Batres Guadarrama describió como “una visión a largo plazo”. El mandatario capitalino estableció un ambicioso objetivo a siete años: lograr que al menos el 25% del agua provenga de la captación de lluvia, reduciendo así la extracción de pozos. El mandatario señaló que existen desafíos considerables, incluida la disminución de lluvias que alimentan el sistema Cutzamala, la sobreexplotación de los recursos acuíferos y el crecimiento demográfico que, a pesar de ello, continúa aumentando.

La iniciativa propuesta por Martí Batres se enfoca en promover la recolección de agua de lluvia mediante el uso de tecnologías innovadoras, infraestructura de filtración, sistemas de captación automatizados y campañas de concientización que se implementarán tanto en espacios públicos como privados. Enfatizó la necesidad de otorgar a este proyecto la amplitud y prioridad que requiere a través de una reforma constitucional que lo respalde.

El secretario de Gobierno, Ricardo Ruiz, está programado para entregar la iniciativa ante el Congreso capitalino esta semana, lo que será así el inicio de un proceso que podría transformar el modo en que la ciudad gestiona y aprovecha su recurso hídrico.

La titular de la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación (Sectei), Ofelia Angulo, reveló los puntos centrales de la reforma. Esta pretende modificar dos apartados del artículo 9 y uno del artículo 16 de la Constitución local. Se busca, entre otras cosas, incorporar el derecho a contar con instalaciones para el aprovechamiento del agua pluvial y su reutilización en el contexto del derecho a la vivienda. También se proyecta establecer políticas públicas para el manejo y saneamiento del agua, así como fomentar la captación de agua de lluvia.

En relación al Artículo 16, se propone una modificación en el Apartado “B”, que promoverá el reúso obligatorio de aguas grises como parte de la gestión sustentable del agua en el ordenamiento territorial.

Una vez que la reforma sea sometida a análisis, revisión y aprobación por parte del Congreso de la CDMX, se abrirá un plazo de 180 días hábiles para la expedición de las leyes y reformas a las leyes secundarias necesarias para su implementación. Por su parte, la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) contará con 90 días hábiles para llevar a cabo los estudios y establecer las adecuaciones normativas que permitan cumplir con los nuevos mandatos constitucionales.

Marina Robles García, titular de la Sedema, delineó el plan de acción de la reforma que se compone de seis ejes principales. Estos abordan desde la creación de un sistema de captación y aprovechamiento de agua de lluvia hasta el diseño de estrategias para la recarga de los acuíferos de la Ciudad de México. El plan incluye además el tratamiento y uso de aguas servidas, programas de conciencia pública y cultura del ahorro de agua, así como el saneamiento integral y restauración de ríos, barrancas y cuerpos de agua. Un eje transversal se enfoca en la investigación y desarrollo de materiales y tecnologías para el manejo sostenible del agua.