Descubren la reactivación de fallas geológicas en la Ciudad de México

En un descubrimiento que arroja nueva luz sobre los riesgos sísmicos en la Ciudad de México (CDMX), investigaciones preliminares realizadas por especialistas del Instituto de Ingeniería de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) han revelado la activación de fallas geológicas en las alcaldías La Magdalena Contreras y Álvaro Obregón. Este fenómeno, que generó 23 microsismos con magnitudes que oscilan entre 1.1 y 3.2 durante diciembre de 2023 y enero de este año, podría tener implicaciones significativas para la seguridad estructural en la región.

El estudio, que representa un avance crucial en nuestra comprensión de la sismicidad en el poniente de la capital, apunta a la reactivación de fallas geológicas, algunas de las cuales no habían sido mapeadas anteriormente. Los sismos, según los expertos, podrían deberse a una combinación de factores, incluyendo la acumulación de tensión regional, el hundimiento del valle de México, y la recarga del acuífero que alimenta a la zona metropolitana. Además, no descartan que los sismos de gran magnitud con epicentro en la costa hayan creado condiciones propicias para estos movimientos telúricos locales.

FALLA PLATEROS-MIXCOAC

Una de las revelaciones más alarmantes del estudio es el descubrimiento de una grieta de más de un kilómetro de longitud en la zona de Mixcoac, denominada la falla Plateros-Mixcoac. Este hallazgo, sugerido previamente en el mapa de riesgos de la Ciudad de México pero nunca confirmado hasta ahora, indica un desplazamiento permanente típico de una falla de tipo normal, lo que sugiere que la estructura subterránea de la ciudad es aún más compleja de lo que se pensaba.

La importancia de este descubrimiento radica no solo en su impacto potencial en la sismicidad local, sino también en las implicaciones para el diseño y construcción en la zona. Según el informe, las dimensiones y el potencial de la grieta aún son objeto de investigación, y las estimaciones actuales para definir acciones de diseño en la zona no habían considerado la existencia de esta falla.

Los expertos de la UNAM, entre ellos Leonardo Ramírez Guzmán y Moisés Contreras, han adelantado que continuarán monitoreando la geometría de la falla y la velocidad con que se mueve la superficie. Este trabajo es crucial para estimar escenarios futuros y determinar el impacto que la falla podría tener en edificios, casas e infraestructura existente.

Los resultados de esta investigación serán indispensables para ajustar las normativas de construcción actuales y asegurar que las estructuras estén preparadas para soportar los movimientos sísmicos que podrían ocurrir debido a esta y otras fallas geológicas activas en la región.