Fallece Sven-Göran Eriksson: un legado en el futbol mundial

Sven-Göran Eriksson, exentrenador de la Selección Mexicana, ha fallecido este lunes 26 de agosto a los 76 años, tras una lucha contra un cáncer terminal que él mismo reveló en enero de este año. La noticia fue confirmada por su exrepresentante, Bo Gustavsson, quien indicó que Eriksson murió en su hogar, rodeado de su familia cercana, incluyendo a su hija Lima, su hijo Johan, su esposa Amana y su nieta Sky.

El comunicado de la familia pidió respeto durante este difícil momento, solicitando privacidad para afrontar el duelo. “Sven-Göran Eriksson ha fallecido. Después de una larga enfermedad, murió durante esta mañana en casa, rodeado de su familia. La familia de Sven-Göran Eriksson pide respeto pues su deseo es poder afrontar su duelo de manera privada y no ser contactados”, señala el mensaje.

Un Hito en su Carrera y el Futbol Mundial

Eriksson, nacido en Torsby, Suecia, el 5 de febrero de 1948, tuvo una carrera destacada tanto como jugador como entrenador. Su trayectoria como director técnico lo llevó a liderar a tres selecciones nacionales en la Copa del Mundo, un logro único en la historia del futbol. Tras retirarse como futbolista, Eriksson se destacó rápidamente en Suecia con el IFK Göteborg, llevándolos a ganar la Copa de la UEFA en 1982. Su éxito en Europa lo catapultó a equipos renombrados como el Benfica, la Roma y la Lazio, donde ganó la Serie A en la temporada 1999-2000.

En 2001, Eriksson hizo historia al convertirse en el primer entrenador extranjero de la selección de Inglaterra. Durante su tiempo con los “Three Lions”, participó en dos Copas del Mundo (2002 y 2006) y una Eurocopa (2004). Aunque no alcanzó las etapas finales de estos torneos, su habilidad para manejar la presión y su enfoque metódico le ganaron el respeto de jugadores y aficionados.

Su carrera también incluyó pasos por clubes como el Manchester City y el Leicester City, así como la Selección de México en 2008. Aunque su periodo en México fue breve y marcado por dificultades, contribuyó a la transición hacia una nueva generación de futbolistas.

Eriksson se destacó por su capacidad para adaptarse a diferentes contextos culturales y desafíos, dejando una huella duradera en el futbol mundial. Su legado perdura no solo por los títulos ganados, sino por su influencia en el desarrollo del juego en diversas partes del mundo.