El ex gobernador de Puebla, Mario Marín Torres, llegó a su residencia en Puebla la madrugada de este miércoles, custodiado por agentes de la Guardia Nacional (GN). Esta llegada marca el inicio de su arraigo domiciliario mientras enfrenta un proceso penal por el delito de tortura contra la periodista Lydia Cacho Ribeiro.

 

Marín fue trasladado desde el penal de El Altiplano, en el Estado de México, donde estuvo recluido desde enero de 2023. El ex mandatario abandonó el centro penitenciario a la medianoche y llegó a su casa en Puebla bajo estricta vigilancia.

 

Condiciones del arraigo y medidas cautelares

 

La Juez Segunda de Quintana Roo, Angélica del Carmen Ortuño, dictó el cambio en las medidas cautelares el pasado sábado. Ahora, Marín Torres debe permanecer en su domicilio, sin la posibilidad de salir, y usar un brazalete que será monitoreado por la Unidad de Supervisión de Medidas Cautelares. Además, le fue confiscado su pasaporte y visa, y se ha emitido una alerta a las autoridades migratorias para evitar su salida del país.

 

Videos del evento muestran al ex gobernador con una playera azul mientras es trasladado en una unidad de la GN, donde agentes lo custodiaban. En las imágenes, Marín aparece con un semblante tranquilo y sigue las instrucciones del personal de seguridad.

 

Durante la mañana de este martes, se observó escasa actividad fuera de la vivienda de Marín. Se notó la llegada de un vehículo proveedor de señal de televisión por cable, sugiriendo un interés mediático en el caso.

 

Este desarrollo sigue a la decisión judicial que modificó las condiciones de su detención, permitiendo que Marín Torres enfrente el proceso desde su hogar en lugar de permanecer en prisión.