Migrantes esperan el fin de las lluvias para continuar hacia EU

Las lluvias registradas en el Istmo de Tehuantepec obligaron a decenas de migrantes, principalmente centroamericanos, a permanecer varados en el municipio de Juchitán, Oaxaca.

​La falta de recursos económicos y refugios los obliga a dormir bajo la lluvia, sobre cartones y en casas de campaña húmedas, lo que afecta su salud, principalmente con infecciones respiratorias agudas.

Carolina viaja con sus tres hijas y su marido. Como muchos venezolanos que abandonan su país, busca llegar a Estados Unidos. Padece asma, por lo que la lluvia se convirtió en una pesadilla para ella.

“Hemos dormido muy mal, a veces dormimos bajo la lluvia, cayéndonos agua encima, los niños tapándolos con bolsas, los zancudos, han picado a los niños y también le han dado mucha fiebre, hemos estado en una situación horrible que la verdad yo no se lo deseo a nadie”.

Desde el 4 de enero, cuando las autoridades federales cerraron el “Centro de Movilidad Migratoria”, los migrantes, en su mayoría venezolanos, hondureños, ecuatorianos y guatemaltecos,se quedaron sin recursos suficientes, no han tenido otra opción que dormir en cualquier lugar.

La familia de Carolina, como muchas otras, pasa las noches a la orilla de un estacionamiento, volviéndose presa fácil de la lluvia y el frío.

“Hay veces que dormimos hasta en el suelo pelado, así piso, suelo pelado sin nada, ahorita estamos durmiendo en cartones, en una carpeta que nos regaló una señora. Gracias a Dios ahí es donde duermen dos de mis niños, no los tres, porque ando con tres y afuera duermo con los demás niños donde les pongo un plástico cuando llueve, pero se mojan”.

En entrevista, Carolina expresó que no todo ha salido como lo planearon, pues antes de partir, familiares que pasaron primero por esta ruta les comentaron que los municipios tenían habilitados refugios temporales para ellos. Sin embargo, al llegar, todo cambió.

“Ya como usted ve, antes nos daban un alojo para quedarnos, un refugio, nos daban hospedaje en algún lado, pero ya no confían en nosotros. Seamos honestos, no confían en nosotros, nadie nos quiere ayudar con comida, tenemos a los niños muy enfermos”.

Más de 700 migrantes se encuentran esperando que la lluvia les permita avanzar a pie en su ruta hacia el llamado “Sueño Americano”.

De acuerdo con las autoridades de Protección Civil, será hasta dentro de cuatro días cuando el clima cambie; entonces los migrantes podrán continuar su viaje.